Si gestionas un hotel independiente o una pequeña cadena, seguro que tu día a día está lleno de números y datos: reservas, ocupación, precios, facturación, comentarios de clientes, rendimiento de campañas… La información está ahí, pero muchas veces dispersa, desordenada y difícil de aprovechar.
Si alguna vez has sentido que navegar por los datos de tu hotel es como intentar encontrar un calcetín en una maleta desordenada, este artículo es para ti. Vamos a ver cómo puedes organizar y aprovechar tu información sin complicaciones, sin necesidad de ser un experto en tecnología.
La mayoría de los hoteleros ya tienen acceso a una cantidad enorme de datos, pero la gran pregunta es: ¿estás usándolos para mejorar la gestión de tu hotel o simplemente los estás acumulando? Otra pregunta relevante podría ser: ¿sabes si tus datos son fiables y están completos? Pero eso merece un artículo aparte.
Veamos un ejemplo real. Un pequeño hotel en Fuerteventura recibe reservas desde Booking, su propia web y llamadas directas. También tiene campañas en Google Ads y redes sociales. Sin un sistema (método) claro y sencillo, y suponiendo que dispone de datos limpios y completos, el gerente se guía más por intuición que por datos reales, perdiendo oportunidades de optimizar precios y marketing.
Esto es lo que pasa cuando los datos están desperdigados y se analizan de manera independiente:
✔ No sabes cuál de tus canales de venta funciona mejor.
✔ No puedes anticiparte a cambios en la demanda.
✔ Tomas decisiones a ciegas, basándote en sensaciones en lugar de números.
La buena noticia es que organizar la información de tu hotel no requiere una inversión enorme ni una consultoría externa. Solo necesitas seguir tres pasos sencillos:
El primer paso es evitar que los datos estén en 20 sitios distintos. Unifica toda la información en un solo lugar:
💡 Ejemplo práctico: sé de un hotel en el norte de Mallorca que empezó a registrar manualmente en una hoja de cálculo las fuentes de sus reservas. En tres meses, descubrieron que el 70% venían de Instagram y apenas un 10% de Google Ads. ¿El resultado? Dejar de gastar dinero en Google, dejar de perder tiempo y pasta con las OTAs y duplicar la inversión en redes sociales. Resultado: aumento de las reservas directas.
No necesitas analizarlo TODO. Enfócate en los datos que te ayuden a tomar decisiones rápidas. En particular, las métricas mas relevantes son:
📌 Ocupación y ADR (tarifa media diaria): Para ajustar precios según demanda.
📌 Canales de reserva: Para saber qué plataformas te traen más clientes rentables.
📌 Comentarios y valoraciones: Para detectar patrones y mejorar la experiencia del huésped.
Si tienes estas tres métricas controladas, ya estarás por delante del 90% de los pequeños hoteles en cuanto a gestión basada en datos.
💡 Consejo: empieza analizando la que te sea mas fácil!
El objetivo es que los datos trabajen para ti, no al revés. Usa herramientas que automaticen la recolección de información y te presenten informes fáciles de entender.
No necesitas un software carísimo ni contratar analistas. Hoy existen plataformas que conectan tus datos y generan reportes en minutos, sin esfuerzo. Ejem! (BIFLIX)
💡 Ejemplo práctico: Un alojamiento rural en Menorca empezó a usar una herramienta de analítica hotelera que recopilaba datos de reservas y precios en tiempo real. Resultado: ajustaron sus tarifas dinámicamente y aumentaron su facturación en un 15% en solo tres meses.
Si ya estás convencido de que organizar tus datos puede cambiar la forma en que gestionas tu hotel, te estarás preguntando: ¿cómo se integran todas estas herramientas sin que sea un lío tecnológico?
En el próximo artículo te contaré qué herramientas fáciles y accesibles pueden ayudarte a conectar y automatizar los datos de tu hotel sin complicarte la vida. Porque sí, la tecnología puede ser tu aliada… si sabes elegir bien. ¡Nos vemos en el siguiente capítulo! 🚀
Marcello Bresin
(esto no se escribió usando inteligencia artificial!)
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